Año tras año, el grupo “El Tercer
Acto”, afronta un nuevo reto en su ya dilata carrera de montajes de
obras musicales. Todos y cada uno de ellos nos ofrecen la posibilidad de salir
del Colegio Menesiano, y de su espectacular teatro, con la sonrisa dibujada en
la cara; una expresión que siempre tiene el mismo significado: la estela de los
sueños. En un mundo donde la materialidad es parca en ese otro sentido lúdico y
onírico de la vida, David López Muñoz y sus compañeros —aficionados en el sueldo,
pero grandes profesionales en el esfuerzo, la ilusión y el resultado final—, son
capaces de darle un sentido único a la cultura —quizá el único que debería
tener, y al teatro en particular—, dotándola de ese efecto único que solo
poseen los sueños: la fuerza de la verdad, porque ciertos y verdaderos son los
resultados que el pasado sábado vimos sobre el escenario, donde una cuidada escenografía
—con la carroza plagada de brillantes como pieza más exclusiva—, pasando por un
no menos espectacular vestuario de todos y cada uno de las actrices y actores
que pisaron las tablas del teatro Menesiano, fueron la muestra más palpable de
la pulcritud y seriedad con la David López Muñoz se toma su trabajo
como director de teatro, pues además de dirigir, es el alma que levanta y
protege cada uno de estos veleros que surcan los mares de la ilusión, y que en
esta ocasión, lo hacen con la calidez de un perfecto cuento de hadas
reconvertido en musical por primera vez en España, ya que ese es el gran reto
de esta temporada, estrenar la primera adaptación original en español del
musical “La Cenicienta”, un libreto escrito originalmente por Douglas Carter Beane, con música de Richard Rogers y canciones escritas por Óscar Hammerstein, que ya fue estrenado
en Broadway en 2013.
No sabemos cómo es La Cenicienta de Broadway, pero sí la
del Teatro Menesiano, una suerte de escenas que por sí solas reivindican el
valor de la sencillez y la autenticidad de aquello que sale desde el corazón.
La variedad de voces y registros nos hacen ser más generosos, si cabe, con la particular
dificultad que cada musical entraña, sobre todo, cuando se trata de una primera
adaptación al español, en la que el bueno de David ensalza la labor realizada
por Claire
Byrne a la hora de poner en valor cada uno de los temas que se cantan y
bailan en la función, pues en esta Cenicienta
se canta y se baila, dando con ello, la oportunidad de demostrar su valía a ese
gran cuerpo de baile y coros compuesto por 35 miembros en esta obra. A los que hay
que unir el elenco de once actrices y actores que protagonizan el musical; un
elenco en el que destaca la gran voz, por limpia, sonora y contenida en el
volumen y en el tiempo de Marie,
interpretada por Laura Rivaya Caneda. De igual forma, hay que destacar la voz de
Cenicienta en el papel de Ella, interpretada por Isabel
Lázaro de Chorro, dinámica, alegre y muy predispuesta durante toda su
actuación, con momentos estelares como el del cambio del vestido, todo un
efecto especial digno de alabanza, a lo que habría que unir el buen hacer del
resto de compañeros.
En definitiva, si quieren empezar
las Navidades con un buen pie en compañía de pequeños y mayores, ya saben dónde
hacerlo, pues no en vano este cuento de hadas aúna las cualidades perfectas
para pasar una buena tarde en compañía de la familia, ya que no hay nada mejor
que hacerlo bajo la calidez de un perfecto cuento de hadas reconvertido en
musical por primera vez en España.
La información sobre cómo
conseguir las entradas la tiene en el siguiente enlace:
Ángel Silvelo Gabriel.
Mil gracias Ángel un año más por tus palabras y por dedicar un espacio en tu blog a hablar de nuestro proyecto. ¡Gracias por tanto cariño!
ResponderEliminar¡¡¡Muchísimas gracias, Ángel!!! Lo cierto es que, es desde el cariño de donde intentamos hacer todo esto, y nos alegra que disfrutarais tanto, de verdad. Os esperamos en cualquiera de nuestras funciones. ¡Gracias!
ResponderEliminar