Hace unos meses KUVE nos presentó su segundo single “Singapur”. Un tema lleno de energía positiva que incita a afrontar los cambios sin miedo, a hacer caso de nuestro instinto sin temor a que nos juzguen. Pretende dar la oportunidad de nacer una vez más a todo aquel que esté dispuesto a elegir un camino nuevo porque antes tenía una forma de vida que no le representaba. En definitiva, para los valientes!!
Ahora el grupo anuncia las fechas de su gira para que miremos el otoño con otros ojos, y nos invita a que formemos parte de su fiesta con desinhibición y buen rollo, tal y como nos transmite Singapur.
2013 está siendo un año intenso para KUVE. Tras el lanzamiento en febrero de su primer trabajo: “Regresión” y la inclusión del grupo en algunos de los principales festivales nacionales: Alhambra Sound, Sonorama, Talavera Spring Festival, Let´s Festival. Si quieres ver a KUVE en directo:
13 Diciembre – SEVILLA – Sala Custom (+ Second)
En breve anunciaremos nuevas fechas…
KUVE, REGRESIÓN: CANCIONES DE
GUERRA PARA ESCAPAR DE UNA VIDA PERFECTA
La melancolía y la necesidad de
partir de nuevo desde cero, atraviesa la melodía de las canciones de Kuve como la
neblina que se deposita sobre nuestros sentidos en las grandes despedidas. Kuve
han trazado una línea divisoria sobre la que crear un nuevo mundo en el que
construir una senda que les lleve lejos, muy lejos. Regresión, está compuesto
por once canciones de guerra para escapar de una vida perfecta en la que ya no
se producen antiguas emociones. Esa es la premisa del disco, ir en busca de
nuevas sensaciones, y con ello, transmitir algo nuevo y diferente. Ya ha pasado
un tiempo desde que nos presentaron su primera maqueta llamada como ellos,
Kuve, donde nos mostraban sus primeras nueve canciones (alguna de ellas también
se incluye en este Regresión), y sin necesidad de ponernos nostálgicos,
comprobamos el largo y duro camino que han recorrido Maryan Frutos y Carlos
Otero para llegar hasta el nivel que han alcanzado con su flamante primer
disco. Regresión son once canciones descaradamente pop, pero también once historias
donde apreciamos las caricias y la ternura de una mujer que se compaginan con
la fuerza de la guitarra de un hombre, que juntos, están dispuestos a pelear
por tener su propio lugar en el mundo de la música. Para todos aquellos que
tuvimos la oportunidad de conocerlos allá por el mes de abril del año 2011 ya
sabemos de sus grandes cualidades para la música. La voz cristalina, potente y
mágica de Maryan, a la que hay que unir la maestría en la guitarra de un Carlos
Otero que es el gran artífice de un sonido que en Regresión ha sabido
identificar los puntos fuertes de un grupo que sabe lo que quiere. El mimo y el
amor con el que está hecho el disco se pone de manifiesto en mil y un detalles,
que van desde la producción de un Raúl de Lara (que para esta ocasión ha sabido
traducir las sensaciones que Kuve han querido transmitir en su primer trabajo),
hasta las letras de cada una de las canciones o la labor de postproducción.
Nadie te dijo es el tema que abre
el cd, y que además, es el elegido como primer single y videoclip de este
Regresión. Una canción cargada de fuerza y energía en la que se aprecian los
nuevos matices con los que Maryan y Carlos la han barnizado para demostrarnos
sus dotes musicales; atrevida, directa y profundamente bailable, así es la
tarjeta de presentación de este Regresión, que acaba en un bucle que nos lleva
a Singapur con el mismo aura del que procedíamos. Aquí la voz de Maryan se nos
muestra clara y diáfana como el sol del amanecer en primavera, lo que hace
ganar enteros a la canción pues su presencia es fundamental en este juego de
nuevas sensaciones que juegan a la seducción. Regresión es el tema homónimo del
disco que refuerza ese viaje que busca nuevas metas en el que la firmeza de la
sección de cuerdas funciona como un fuerte músculo que sostiene el armazón de
la canción. La siguiente etapa de nuestro periplo es Siluetas de invierno, un
tema compuesto por Sean Frutos (frontman de Second y Mr. Kuve) y que en este
disco se comporta como un punto de inflexión para lo que más tarde se nos
avecina, y que sin duda, nos propone de una forma muy inteligente un juego
donde los sentimientos se funden con una melodía a la vez pegadiza y
demoledora, lo que sin duda nos sirve para identificar el lado más melancólico
del disco. Como melancólico es el mejor tema del disco, Tu último domingo, gran
canción que te agarra desde la primera nota y ya no te suelta; mágica,
evocadora, sensual y con una letra que rompe los espejos de los falsos
reflejos: “motos rugen con la luna llena/
Madrid vacía de promesas/…/ puedes consumirme hasta el vacío/ rodar la piedra
en que nos convertimos”, donde la voz de Maryan se funde en un viaje
perfecto con la linealidad de los mástiles que bailan en un abrazo infinito con
las olas del mar.
Mi mente en el congelador es la
vuelta a la firmeza compositiva de Kuve, donde la perfecta simbiosis de Maryan
y Carlos nos deja como resultado un corte perfecto de medio tiempo, que se
transforma en balada pop en Euritmia en la que de nuevo la calidez de Maryan
hace de las suyas a la hora de caer enamorado de una historia de ruptura con la
que escapar de esa vida perfecta que siempre nos persigue: “no quiero
detenerme, prefiero conocerte/ ver amanecer, verte despertar… /sé que tal vez,
nada es para siempre”. Una letanía sonora que continúa en Invisibles cuerpos,
donde Kuve nos invita a jugar al juego de los nuevos amores que se funden con
otros más evocadores y nostálgicos en A leguas (sin duda estamos en el bloque
más íntimo y personal del disco); una canción que desprende mil y un reflejos
que, como las bolas de una discoteca, nos envía mensajes contradictorios de
luces y sombras bajo el signo de una melodía hipnótica que de nuevo nos invita
a trasladarnos a un espacio más sensorial.
Dando vueltas sigue siendo el
tema leitmotiv de las buenas vibraciones que desprenden Maryan y Carlos,
ejemplo perfecto de perfecta canción pop, vibrante y rompedora en todos los
sentidos: “siempre dando vueltas, dando vueltas hasta caer”. Y que nos lleva
sin remedio hasta el último tema del disco, En círculos, un buen y sentido
homenaje a sus venerados Coldplay, con un inicio de guitarra que para sí
quisieran los británicos. Sin duda es otra de las grandes canciones del este
Regresión, porque una vez más comprobamos lo bien que le sienta al grupo ese
dejarse llevar por nuevos territorios más aguerridos que nos crean adicción.
En definitiva, Kuve y su primer y
flamante disco, son un magnífico ejemplo donde el amor, la pasión y el desgarro
algo atenuado se dan la mano con once canciones de guerra para escapar de una
vida perfecta.
Reseña de Ángel Silvelo Gabriel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario