Tenía que llegar el día y llegó. Parece
mentira. Se me ha hecho mucho más largo de lo que ha sido y no precisamente
porque no lo haya disfrutado. Supongo que tengo la misma sensación que Ed Bloom
el día que conoció al amor de su vida:
"Dicen que cuando conoces al amor de tu vida, el tiempo se para. Y es verdad. Lo que no dicen es que cuando vuelve a ponerse en marcha se mueve más rápidamente, para recuperar lo perdido."
Hoy hace un año dimos nuestro primer concierto,
y de repente, sin que nos hayamos dado cuenta, ha pasado un año... pero a la vez
pienso "joder... ¿sólo un año?" Pues sí, sólo un año.
Recuerdo aquella noche en El Intruso como una
de las más felices de mi vida. Acompañado de amigos, conocidos y familiares, que
no faltaron a la puesta de largo de 5 chavales que emprendían un difícil camino
con toda la ilusión del mundo. Un camino en el que hemos conocido gente
maravillosa. Un camino que empezamos con la esperanza de lograr un sueño. Un
camino mucho más fácil de recorrer gracias a toda la gente que nos ha ayudado y
que ha hecho que no desistamos en alcanzar nuestra meta. Un camino que sin duda
merece la pena recorrer.
Y desde aquí, quiero dar las gracias a todos
los que siempre han estado a nuestro lado, pero también a los que un día
estuvieron. Y por supuesto, a ti.
Hoy, con más fuerza que nunca, este sueño ha vuelto para cumplir su (feliz) aniversario
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